Las hemorroides se describen como masas o cojines de tejidos inflamados que rodean el canal anal, es por eso que también se les conoce como almorranas. Los síntomas de esta condición pueden ser similares a otras enfermedades, pero hay maneras de cómo diferenciar esta enfermedad de otras enfermedades anales.
Las hemorroides afectan el canal anal. La línea dentada determina si la hemorroide es interna o externa. Las hemorroides externas se encuentran por debajo de la línea dentada, mientras que las hemorroides internas se encuentran por encima de la línea dentada. Los síntomas de esta condición son específicos. Por lo tanto, conocer los síntomas es una de las maneras de diferenciar esta enfermedad de otras enfermedades anales.
El sangrado debido a las hemorroides es rojo brillante y se produce con las heces o después de defecar. La sangre suele gotear en el agua del inodoro. También se puede observar sangre en el papel higiénico después de la excreción. Cuando hay un prolapso hemorroidal, una mancha de sangre también puede ser vista en su ropa interior. Esta condición también causa irritación y picor en el área afectada. Las hemorroides prolapsadas , externas o trombosadas provocan dolor. Los acrocordones y el estreñimiento por lo general se presentan con la enfermedad hemorroidal.
Las causas más comunes de las hemorroides
Debido al envejecimiento, los tejidos conectivos que apoyan las hemorroides se deterioran causando abultamiento y distensión en el canal anal. Los tejidos conectivos del canal anal pueden deteriorarse debido al aumento de la presión en la región intra-abdominal y dar lugar a un prolapso del canal anal. Cuando los vasos pierden apoyo, se distienden.
Otras causas incluyen:
• Estreñimiento – el paso de heces duras provoca pequeños cortes y desgarros en los tejidos que rodean el canal anal haciendo que se hinchen.
• Embarazo – Debido a los cambios hormonales y la presión en el abdomen debido al peso del feto, el flujo de sangre en la zona anal se ve afectado y hace que las venas se abulten.
• Parto – Debido a demasiada presión y esfuerzo durante el parto, se pueden producir hemorroides prolapsadas o trombosadas.
• Levantar objetos pesados – Al levantar objetos pesados, la presión se concentra en la parte baja del abdomen y aumenta la presión sobre la zona anal causando que los tejidos en el canal anal se abulten.
• El coito anal – La inserción del pene en el ano puede causar fisuras y cortes en las venas anales, lo que puede resultar en inflamación.
Hemorroides y Otras Enfermedades Anales
Cuando el sangrado rectal está presente, el cáncer de recto se debe descartar. Para una persona más joven, sin antecedentes familiares de cáncer, no hay otros síntomas sistémicos, el sangrado está asociado con las hemorroides, la sigmoidoscopia o anoscopia son lo suficientemente buenas. Pero, para una persona mayor que experimenta un cambio en la defecación y tiene una historia familiar de cáncer colorrectal, una neoplasia proximal debe descartarse con una colonoscopia completa.
Las hemorroides y fisuras anales son confundidas comúnmente porque tienen los mismos signos y síntomas. Ambas condiciones causan sangrado y dolor en el área anal. Para diferenciar los dos, el médico debe evaluar eficientemente su canal anal. Las hemorroides son la hinchazón de las venas alrededor de la zona anal mientras que las fisuras anales son rasgaduras o cortes en la piel que rodea el recto. Las fisuras anales ocurren cuando usted está tratando de excretar heces muy grandes y duras que estiran la piel sobre el recto y hacen que se rompa.
Las fisuras anales también pueden causarse debido a una diarrea severa que causa un traumatismo en la piel alrededor del recto. Las fisuras anales generalmente causan ardor, dolor agudo y punzante durante o después de pasar las heces. Las hemorroides y fisuras anales son tratadas habitualmente en casa, pero cuando el dolor empeora y los tratamientos caseros no funcionan, usted debe consultar a su médico para un diagnóstico y tratamiento adecuados. Su médico le realizará un examen visual en su área anal. La Anoscopia puede ser necesaria para ver el alcance del desgarro. Las fisuras anales generalmente se tratan mediante la prevención del estreñimiento. Por lo general se curan por sí solas después de unas semanas.
Cómo tratar la enfermedad hemorroidal
Las hemorroides se tratan comúnmente con cambios en el estilo de vida, la modificación de la dieta, procedimientos no quirúrgicos o hemorroidectomía quirúrgica. Por lo general, cambios en la dieta, tales como la adición de más fibra y líquidos reducirá los síntomas. Las hemorroides grado 3 y grado 4 pueden necesitar intervención quirúrgica.
Tenga en cuenta que la evaluación de un médico es importante si quiere saber cómo diferenciar las hemorroides de otras enfermedades anales.