El revestimiento del canal anal se compone de vasos sanguíneos que suministran circulación a los tejidos blandos que mantienen la zona sana y funcional para la excreción de los desechos humanos. Cuando se pasan las heces durante la defecación, el revestimiento del tracto anal junto con sus vasos sanguíneos son sometidos a tensión, ya que se estiran para permitir que los intestinos se muevan hacia la abertura anal. Los vasos también reciben presión cuando el individuo está en una posición sentada sobre una superficie dura o por períodos prolongados. Cuando se producen tales casos, los vasos sanguíneos se someten a dilatación o ensanchamiento, forzando la sangre a fluir más rápido. La frecuencia de esta circunstancia a menudo inhibe los vasos sanguíneos de regresar a la elasticidad normal, causando que se queden distendidos y que volúmenes más grandes de sangre se distribuyan, lo que lleva a la acumulación de sangre, causando bultos a lo largo del tejido, comúnmente conocidos como hemorroides.
La presencia de las hemorroides en el canal anal o en la piel que rodea la abertura anal a menudo se convierte en un problema para los individuos cuando la recurrencia frecuente se produce o se deja la condición sin tratar. Aunque hay disponibles tratamientos conservadores, caseros, y tratamiento médico para el problema de salud, siempre es mejor evitar que el problema médico suceda o se haga recurrente.
Algunas medidas de prevención y tratamiento para las hemorroides incluyen la aplicación de ungüentos de hidrocortisona, la terapia con bolsas de hielo, evitar el uso de irritantes durante la higiene anal, baños de asiento, o procedimientos médicos realizados por médicos especializados en el tratamiento de esta enfermedad. Sin embargo, la investigación y la práctica médica también recomiendan siempre tener hábitos que impidan la aparición de las hemorroides a través de cambios de estilo de vida, y en los últimos años, el uso de un cojín, que ayuda a minimizar la presión en las nalgas al sentarse durante mucho tiempo o durante la defecación .
Estos son de forma redonda y están hechos de materiales blandos como inflable de goma, espuma o gel, los cuales están encerrados en una cubierta de plástico. Estos dispositivos de forma circular tienen un agujero en el centro y se utilizan no solo durante largos períodos de estar sentado, sino que más importantemente durante el movimiento intestinal. Su función es reducir la presión en las venas subyacentes alrededor del canal anal, evitando la distensión de los vasos sanguíneos, por lo tanto, previniendo la posibilidad de la aparición de hemorroides.
También es útil para aquellos que tienen hemorroides inflamadas, ya que alivian la presión, especialmente durante el esfuerzo, lo que permite que se produzca la curación en un mejor ritmo y también minimizar el malestar que se siente de las hemorroides. Debido a que el propósito de un cojín es tanto prevenir la aparición como aliviar la irritación, el producto ya está ampliamente disponible y con frecuencia se incluye con la lista de medidas de salud de un individuo puede hacer para maximizar la prevención y la curación en casos de hemorroides.
Las hemorroides son parte de los problemas de salud comunes en el tracto intestinal. Aunque vistas como una preocupación menor, y muchas veces fáciles de tratar, los individuos nunca deben dar el asunto por sentado. Siempre es mejor tomar medidas que no sólo alivien el problema, sino que también eviten que se produzca.
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